lunes, 19 de febrero de 2018

Video y Audio - Resolución sobre Aplicación de Fitosanitarios y Buenas Prácticas Agrícolas



Los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sustentable y de Agroindustria de la Nación firmaron hoy una normativa conjunta basada en las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) que permitirá establecer un marco para profundizar el trabajo conjunto entre organismos nacionales y provinciales.

Asimismo se anunció la reglamentación de la ley de Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios.

Link de conferencia de prensa de los ministros Bergman y Etchevehere.

Link de audio del ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere.


El Gobierno avanzó en una resolución sobre políticas públicas para la aplicación de fitosanitarios



Los ministerios de Ambiente y Desarrollo Sustentable y de Agroindustria de la Nación firmaron hoy una normativa conjunta basada en las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) que permitirá establecer un marco para profundizar el trabajo conjunto entre organismos nacionales y provinciales.

Asimismo se anunció la reglamentación de la ley de Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios.

En el mediodía de hoy y luego de la firma, los ministros Etchevehere y Bergman brindaron una conferencia de prensa en la cual explicaron el objetivo de avanzar en políticas públicas para la aplicación de fitosanitarios.

La agricultura argentina viene incorporando niveles crecientes de tecnificación para aumentar su productividad.

El uso de fitosanitarios ha sido parte de este proceso, fundamentalmente para prevenir y controlar plagas o enfermedades en los cultivos.

La adopción de las Buenas Prácticas Agrícolas (BPA) en el manejo de los fitosanitarios constituye un elemento fundamental para una agricultura sostenible.

Debido a ello, ambos Ministerios avanzarán en una mejor definición de los principios rectores para la regulación de la aplicación de estos productos, especialmente en zonas de amortiguamiento o "buffer" adyacentes a áreas que requieren especial protección.



Por este motivo, se creará un Grupo de Trabajo que tiene por objeto elaborar principios que regirán las políticas públicas sobre las aplicaciones de fitosanitarios en la agricultura y la alimentación; formular recomendaciones para mejorar la adopción de las buenas prácticas y para fortalecer los sistemas de control y monitoreo de las actividades de aplicación.

El ministro de Agroindustria, Luis Miguel Etchevehere, señaló "esta Resolución va en el sentido de seguir fortaleciendo las políticas e instituciones agropecuarias nacionales para la buena gestión de los fitosanitarios, basadas en las BPA, y que cada provincia utilice como marco referencia para reglamentaciones propias".

Anunció, asimismo, que el próximo 5 de marzo se ha convocado una reunión conjunta de los Consejos Federales de Medio Ambiente y Agropecuario para tratar esta temática.

En tal sentido, el ministro de Ambiente, Sergio Bergman, indicó:

"Siguiendo con las sugerencias del presidente Macri, de constituir un equipo, este modelo superador tienen que ver con la sinergia de una visión que está alienada hacia dónde vamos y eso es la inserción inteligente de la Argentina en el mundo".

Además sostuvo: "Nos basamos en un mínimo común denominador que es la validación académica, técnica y la trazabilidad sobre este tema que para nosotros debe ser incorporado de la misma manera que la ley de envases fitosanitarios en la que trabajamos desde el inicio de la gestión".

Para la conformación del Grupo de Trabajo se invitará a representantes del Ministerio de Salud; del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva; del Consejo Federal de Medio Ambiente (COFEMA) y del Consejo Federal Agropecuario (CFA).

Además, serán parte representantes del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable, del Ministerio de Agroindustria, del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa).



Asimismo se podrá invitar a otros Ministerios, como así también facilitar instancias de participación, con carácter consultivo, de otros actores de la sociedad.

Reglamentación de la ley Gestión de Envases Vacíos de Fitosanitarios

Durante el evento, el ministro Etchevehere anunció la reglamentación de la Ley 27.279 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental para la Gestión Integral de los Envases Vacíos de Fitosanitarios.

Esta ley regula el destino de dichos envases en todo el país, garantizando que la gestión de los mismos sea integral y efectuada de un modo que no afecte a la salud de las personas ni al ambiente.

De esta manera se establece la regulación y procedimientos que deben seguir los productores y aplicadores una vez que hayan usado el producto fitosanitario.

Asimismo establece la responsabilidad extendida de los registrantes que ingresan los envases al mercado generando un sistema de responsabilidad empresaria y colaboración público-privada.

En la nueva ley las empresas que registran productos en el mercado tendrán que hacerse cargo del destino de los envases que contienen sus productos.

A partir de esta legislación, se implementan sistemas de recolección y lugares de destino de los recipientes; establece un régimen especial de tratamiento con el cual los productores deberán entregar sus envases libres de producto (a través del triple lavado o lavado a presión) en los Centros de Almacenamiento Transitorio (CAT), donde se procede a su clasificación, y se los canaliza por dos vías: aquellos envases que pueden ser reciclados, y los que irán a disposición final.

Para acceder a la ley hacer click aquí

Agroindustria

martes, 13 de febrero de 2018

Las mayores empresas del mundo prometieron lograr un mundo sin residuos plásticos


El compromiso se inició con once de las más grandes firmas internacionales reunidas en el Foro Económico de Davos.

Coincidieron en una iniciativa para reusar o reciclar el 100% de sus embalajes y envases plásticos antes de 2025.

También invertirán en desarrollar bioplásticos no contaminantes.

Cada minuto se tira al océano un camión lleno de basura y para 2050 habrá más plástico que peces en los mares

Más allá de los negocios, inversiones, productividad y nuevas tecnologías, la problemática ambiental ocupó un lugar en la agenda de los empresarios y jefes de Estado que se reunieron del 23 al 26 de enero en Davos.

Allí, los líderes de once de las mayores firmas globales lanzaron un compromiso para reducir, reutilizar y reciclar el 100% de sus embalajes y envases plásticos de aquí al 2025.

Las empresas firmantes: Amcor, Ecover, Evian, LOréal, Mars, M&S, PepsiCo, Coca-Cola, Unilever, Walmart, y Werner & Mertz se comprometieron además a invertir en la investigación y desarrollo de nuevos bioplásticos no contaminantes, e hicieron un llamado a que más empresas se unan a esta iniciativa.



El CEO de Unilever, Paul Polman, destacó que "es una buena noticia que otras diez grandes empresas nos acompañen en este camino".

La firma de consumo masivo fue la primera en lanzar un compromiso en el foro de Davos de 2017, al plantearse la meta de desarrollar el 100% de sus empaques plásticos reciclables, reutilizables o aptos para el compostaje de aquí al 2025.

"Sin embargo, las industrias de consumo masivo debemos ir más allá", sostuvo Polman.

El ejecutivo planteó cuatro acciones fundamentales: "invertir en innovación dirigida a un nuevo modelo de entrega de productos que promuevan su reutilización; establecer metas ambiciosas para el uso del contenido reciclado post consumo; acordar un "Protocolo Global de Plásticos" para asegurar que los packagings sean compatibles con las infraestructuras de reciclaje existentes; y discutir con los gobiernos las mejoras necesarias en la gestión de los residuos, incluyendo esquemas de responsabilidad extendida del productor".

Por su parte, James Quincey, Presidente de Coca Cola, presentó su plan global para que en 2030, por cada botella o lata que la firma venda en el mundo, ayudará a recuperar el equivalente para que tenga más de un uso.

También anunció inversiones para desarrollar botellas con mayor contenido reciclado; nuevos envases a partir de resinas vegetales y establecer un nuevo estándar para los envases de bebidas, con menor contenido de plástico.

Según datos de la Fundación Ellen MacArthur presentados durante el Foro de Davos, un camión lleno de basura es arrojado al océano cada minuto, y para el 2050, se prevé que habrá más plástico que peces en los mares.

En Argentina, según datos de Ecoplas, se consumen por año 42,3 kg de plástico por habitante, y sólo se recicla un 6% (el promedio mundial es 14%).

"El plástico no es un residuo, sino un recurso", sostiene Verónica Ramos, gerente de la entidad.

"Si los habitantes de la ciudad de Buenos Aires separaran los plásticos que tiran, se podrían recuperar más de 400 toneladas por día, equivalentes al peso de 400 autos", grafica.

Para facilitar el reciclado y reuso de plásticos, la entidad lanzó el año pasado la certificación con sellos en forma de "manito" para diferenciar distintos tipos de plástico: PE (polietileno: se usa en botellas y se puede transformar en prendas de vestir, alfombras y juguetes ); PVC (policloruro de vinilo; se usa en bolsas y se transforma en caños y muebles de plástico); PP (polipropileno: se usa en packaging de alimentos y se transforma en baldes y cepillos); y PS (poliestireno: se usa en envases lácteos y bandejas de alimentos y se puede transformar en perchas y artículos de librería).

por  MARÍA GABRIELA ENSINCK
cronista.com


jueves, 18 de enero de 2018

Nuevos materiales para optimizar la conservación de alimentos


Infografía, gentileza de la investigadora

Investigadores del CONICET ganaron el “Premio Arcor a la Innovación” por desarrollar papeles bioactivos con propiedades antimicrobianas y antioxidantes.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés) el envasado de alimentos forma parte de los factores que inciden en la pérdida de los mismos junto a la recolección, transporte, infraestructura o a los mecanismos de mercado, o de los precios, así como a los marcos institucionales y legales.

Esto hace que hasta un tercio de todos los alimentos se estropee o desperdicie antes de ser consumido por las personas.

Un grupo de investigadores liderado por la Dra. Raquel Martini, investigadora adjunta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) en el Instituto de Investigación y Desarrollo de Ingeniería de Procesos y Química Aplicada (IPQA, CONICET-UNC) estudia el desarrollo de materiales para optimizar la conservación de alimentos.

El proyecto “Desarrollo de papeles bioactivos para el envasado de alimentos” fue ganador de la edición 2017 del premio que entregan Arcor y la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT).

El mismo se hizo acreedor de 150mil pesos que deberán ser destinados a la ejecución del proyecto.

La “Mención Especial Fundación Arcor” fue para Marina Francisca De Escalada Pla, investigadora adjunta del CONICET en el Departamento de Industrias de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires (UBA) por el “Desarrollo de un alimento a base de calabaza fortificada con hierro y probióticos”.


De izq. a der.: Florencia Muratore, Raquel Martini, Nicolás Gañan y Laura Goñi. 
Foto: gentileza Raquel Martini.

Acerca del proyecto

Existen diferentes problemas de conservación durante el almacenaje y transporte de alimentos.

Una de las principales causas es el deterioro de alimentos por ataque de microorganismos, como mohos, levaduras y bacterias, el cual, además de generar pérdidas de alimentos, puede ser nocivo para la salud humana.

Otro deterioro común, es la oxidación de componentes alimenticios por acción del aire, siendo uno de los más recurrentes la oxidación de lípidos, produciendo sabores típicos de rancidez, compuestos tóxicos y pérdida de calidad nutricional.

Otra fuente de importantes pérdidas cuantitativas y cualitativas en los alimentos es la infestación por plagas de insectos poscosecha. Estos pueden atacar materias primas almacenadas, así como productos alimenticios semielaborados y finales debido a su capacidad de ingresar en productos alimenticios envasados durante su distribución o almacenamiento.

Por tal motivo, el objetivo del proyecto es obtener un papel o cartón con propiedades bioactivas tales como antioxidante, antimicrobiana, insectífuga y/o insecticida para el envasado de alimentos, mediante el injerto de moléculas específicas de origen natural sobre celulosa.

“De esta manera, se protege al alimento desde el envase, pudiendo disminuir la cantidad de aditivos del mismo y asegurando extender su vida útil”, explica Martini.

Cabe destacar que dicho proyecto está en desarrollo y Martini junto a su equipo buscan mejorar el proceso para hacer el escalado del mismo y lograr un proceso viable industrialmente.

“El objetivo es seguir ampliando y afianzando la línea de investigación de envases activos y otros proyectos relacionados”, explica la doctora en Ingeniería Química.

En relación al premio Martini expresa que: “resulta un incentivo más para seguir adelante.

Además, por la difusión que tuvo el premio sirvió para acercar el trabajo científico a la sociedad y poder mostrarle a la gente nuestros proyectos y que puedan relacionarlos con la vida cotidiana”.

Forman parte del proyecto liderado por Martini, Silvia Barbosa, investigadora principal en la Planta Piloto de Ingeniería Química (PLAPIQUI), Nicolás Gañán, investigador asistente, Florencia Muratore, becaria doctoral y Laura Goñi, becaria posdoctoral, quienes se desempeñan en el IPQA.

Premio “Arcor a la Innovación”

Este premio, junto a la entrega de la “Mención Especial Fundación Arcor”, se realiza cada dos años desde 2009 y está dirigido a PyMES, universidades e investigadores nacionales y busca fomentar la cultura de la innovación y el desarrollo tecnológico para transferir sus resultados de manera efectiva a la industria de la alimentación.

El objetivo es lograr una mayor productividad y competitividad en el sector, como así también mejorar las condiciones de vida y situación social de las comunidades.

Para más información haga click aquí.

Por Sergio Patrone Firma Paz

CONICET